4 formas en que el low-code ayuda a reducir la deuda técnica

En los últimos 18 meses, las empresas han abierto los ojos a la necesidad de innovación y transformación digital como una cuestión existencial. Los líderes empresariales se han dado cuenta de que el software es fundamental para la innovación digital. A medida que crecía la necesidad de crear rápidamente más aplicaciones, se disparó la demanda de TI. También lo hizo el retraso en el desarrollo de aplicaciones de TI.

La deuda técnica forma parte del desarrollo de software. Una parte de la deuda técnica es inevitable, pero una cantidad excesiva puede sobrecargar a los desarrolladores, agotando los recursos y mermando la capacidad de las TI para innovar y resolver los problemas de la empresa. Según un estudio reciente, el 91 % de las empresas tienen problemas con la deuda técnica. ^[1]

Por desgracia, el impacto de la deuda técnica no hace más que empeorar. Con plazos ajustados y recursos limitados, las empresas a menudo recurren a soluciones rápidas y fáciles fuera de TI para hacer el trabajo. Pero esto crea grandes problemas a largo plazo. Por ejemplo, IDC estima que hasta 2022, el 90 % de las empresa tendrán que remediar la deuda técnica contraída en torno al diseño, la calidad y la seguridad de las aplicaciones que pusieron en marcha rápidamente durante la pandemia.^[2]

Siga leyendo para conocer el impacto de la deuda técnica, por qué es importante la gestión de la deuda técnica y cómo puede ayudar el low-code .

¿Cuál es el impacto de la deuda técnica? 

Por término medio, las empresas de TI dedican el 38 % de su tiempo a actividades de mantenimiento, como la necesidad de mantener las aplicaciones, proteger los datos de la empresa y de los clientes, garantizar la compatibilidad con versiones anteriores, evitar la obsolescencia de la tecnología y dar soporte a los últimos dispositivos o puntos finales.^[3]

Esta interminable lista de elementos necesarios para mantener las operaciones de la empresa consume aproximadamente dos días completos por empleado de TI cada semana. En algunos sectores, como el bancario, las empresas gastan hasta el 75 % de sus presupuestos de TI solo en el mantenimiento de los sistemas heredados. Lejos de ser un problema exclusivo de TI, el impacto negativo de la deuda técnica se extiende a toda la empresa. 

• La deuda técnica impide la innovación y el crecimiento. Los retos complejos requieren soluciones innovadoras. Pero si los equipos de desarrollo dedican la mayor parte de su tiempo a mantener las luces encendidas, no queda tiempo para evaluar casos de uso nuevos o existentes, encontrar aplicaciones que aporten valor empresarial o mejorar la experiencia de los usuarios y clientes.
• La deuda técnica alimenta una desconexión entre las prioridades de la línea del negocio y las de TI. Cuando los líderes empresariales piensan que una solución de TI tardará demasiado o les preocupa no obtener una aplicación efectiva al final, trabajan sin tener en cuenta a TI y compran sus propias soluciones. Este problema se denomina "TI en la sombra" y es un síntoma de una desconexión más amplia entre los equipos de desarrollo y los usuarios empresariales. A largo plazo, crea problemas mucho mayores, como sistemas fragmentados con datos aislados, deuda técnica desordenada, riesgos de seguridad y problemas de gobernanza para el director de sistemas de información, todo lo cual, a su vez, conduce a más deuda técnica. Es un círculo vicioso.
• La deuda técnica es un problema de escalabilidad. Las aplicaciones y los sistemas tienen que funcionar juntos para ser eficaces. Sin embargo, los equipos de TI que lidian con la deuda técnica pueden no tener tiempo para comprobar que las nuevas aplicaciones sean compatibles con las anteriores. Los engorrosos sistemas heredados y las soluciones dispares puestas en marcha por los usuarios de la empresa impiden la integración y limitan la escalabilidad.

Considere esta estadística: Para 2023 se habrán desarrollado e implantado más de 500 millones de aplicaciones y servicios digitales, el mismo número de aplicaciones que se han desarrollado en los últimos 40 años, según IDC.^[4] Con un volumen como este, las empresas no pueden permitirse mantener el statu quo, dejando que la deuda técnica siga acumulándose. Ahí es donde entra en juego el low-code.

Cómo ayuda el low-code a la gestión de la deuda técnica

Albert Einstein dijo una vez: "No podemos resolver los problemas con la misma forma de pensar que usamos cuando los creamos". El low-code proporciona esa forma de pensar fresca. Permite a las empresas crear aplicaciones potentes de forma rápida, al tiempo que reduce la carga de mantenimiento continuo para sus equipos de TI, lo que les permite redirigir los recursos a la innovación que impulsa el negocio.

El low-code es una forma diferente de desarrollar aplicaciones. En lugar de escribir líneas de código, los desarrolladores crean aplicaciones utilizando herramientas de desarrollo visuales y orientadas a la intención. La adopción del low-code permite a las empresas liberarse de la carga de la deuda técnica.

El low-code gestiona la deuda técnica en cada paso: diseño, desarrollo, integración, mantenimiento y más allá.

1. El low-code anima a las empresas y a los informáticos a trabajar en colaboración. Las mejores soluciones surgen cuando los usuarios de la empresa y los desarrolladores diseñan las aplicaciones juntos. El low-code facilita la colaboración y fomenta las aportaciones claras y frecuentes de los usuarios empresariales. En lugar de que el desarrollo de las características se produzca en un silo, los usuarios finales pueden influir en la aplicación a medida que va tomando forma ante sus ojos. Los prototipos y las creaciones en curso ofrecen a los usuarios algo concreto sobre lo que opinar, lo que garantiza que los equipos de desarrollo tengan una idea clara de lo que se necesita.
2. El low-code acelera el tiempo de desarrollo de las aplicaciones sin sacrificar la potencia ni la calidad. El desarrollo de aplicaciones low-code es de 10 a 20 veces más rápido que los enfoques de desarrollo tradicionales. Con el low-code, los equipos se centran en diseñar la solución adecuada y dejan la codificación a la plataforma. Las plataformas low-code adecuadas ofrecen tanto la velocidad de desarrollo como la flexibilidad de la personalización según sea necesario.
3. El low-code aborda el problema de la integración, reduciendo significativamente los gastos generales y el mantenimiento. Las sólidas plataformas de automatización low-code reúnen todo en un único flujo de trabajo, incluyendo a los trabajadores humanos, la inteligencia artificial (IA) y la automatización robótica de procesos (RPA), además de las herramientas externas, los sistemas heredados y los datos, manteniendo los datos en su lugar. Esto permite a las empresas integrar aplicaciones y automatizar procesos —incluso los más complejos— de forma rápida y sencilla.
4. Las aplicaciones low-code son significativamente más fáciles de mantener. Cuando las aplicaciones se despliegan, incorporan automáticamente los últimos estándares de interfaz y seguridad y se ejecutan en los últimos dispositivos móviles y plataformas en la nube, lo que elimina la necesidad de modificar las aplicaciones para varios entornos y sistemas operativos. Las nuevas aplicaciones no se suman a la lista de deudas técnicas que sobrecargan a los equipos de TI. Los requisitos de mantenimiento se simplifican, con actualizaciones, certificaciones de seguridad, controles normativos y consideraciones de rendimiento gestionados automáticamente por la plataforma.

Las plataformas low-code liberan a los equipos de desarrollo de la deuda técnica, permitiéndoles volver al tipo de desarrollo innovador que les atrajo a las TI en primer lugar. Dado que la plataforma se encarga de las actualizaciones y el mantenimiento que suelen llevar a cabo los equipos de TI, el low-code no solo reduce la carga de mantenimiento del ya ocupado personal de TI, sino que reduce considerablemente los gastos generales de la ejecución de una aplicación.

Gestión del impacto de la deuda técnica

Vea el vídeo para escuchar lo que el director general de Appian, Matt Calkins, tiene que decir sobre el low-code y la deuda técnica. Y descubra más ventajas del low-code en el informe técnico: El futuro del desarrollo de aplicaciones empresariales.